Nombre: Jose
Apellidos: Cansado Lamata
Nacido y/o domiciliado en Ateca (Zaragoza) 1893
Detenido en 23 de septiembre de 1936
Fallecido en 30 de octubre de 1936
Fosa: Cuelgamuros
Profesión: Agricultor
Afiliación política: UGT
Biografía:
Hijo de Blas y de Ildefonsa. Domiciliado en calle de San Miguel. Jornalero. Casado con Manuela Pérez Pinilla, de Ateca, con la que tuvo siete hijos: Encarnación, Pascual, Antonio, Fernando, Jesús, Ana María y José.
Socialista y de UGT fue miembro fundacional del grupo local de Acción Republicana a su creación en diciembre de 1930. En las elecciones de abril de 1931 estuvo de interventor por la candidatura republicano-socialista.
Siendo secretario de la Asociación Obrera de la UGT Labor y Libertad, el 1 de febrero de 1932 firmaba el escrito del presidente Salustiano Jimeno dirigido al Alcalde, al Gobernador y al Ministro de Trabajo pidiendo la aplicación de los dictados de la República a Francisco Hueso de la Orden y a la viuda de Francisco Acero para que se le expropiasen los terrenos que tenían sin cultivar en Armantes y El Val, para que pasasen a manos de la clase trabajadora.
Como elector del Frente Popular, también fue uno de los firmantes del escrito presentado por la Asociación Labor y Libertad pidiendo la destitución del médico José Payno Marchante y del recaudador municipal Enrique Marín Compés por manifiesta dejación de sus deberes, según ellos.
Colaborador del periódico Vida Nueva, tras el triunfo del Frente Popular, entre marzo y mayo de 1936 publicó varios artículos reivindicativos unas veces, despectivos otras, pero con una exquisita y culta redacción no exenta de ironía o romanticismo, según la ocasión.
En abril de 1936 entró a formar parte del ayuntamiento, pues el gobernador civil destituyó al radical Rafael Bosch y al monárquico Justo Campos Duce y los sustituyó por él y por Ramón Inogés Yagüe.
Con motivo de la celebración de la Fiesta del 1º de Mayo, hizo uso de la palabra desde un balcón del Ayuntamiento en el mitin de propaganda socialista realizado en la plaza presidido por el alcalde Agustín Ayerbe tras una multitudinaria manifestación por las calles del pueblo. También intervinieron José María Sánchez, Elías Pérez y Enrique Bendicho Herranz.
Tras la ocupación del pueblo el 23 de julio de 1936 por las tropas sublevadas, supuestamente se escondió con otros ediles y el secretario en el paraje de los Sieterríos, donde eran avituallados por algunos jóvenes, entre ellos su hijo Pascual.
Tras casi un mes huidos y ante la promesa de no ser represaliados regresaron al pueblo, donde el día 22 de septiembre sería detenido con once vecinos más y trasladados al mercado de abastos de Calatayud donde permanecieron presos más de un mes. El 26 de octubre fueron todos conducidos (y 14 más de otros pueblos) hacia Zaragoza, siendo fusilados en Mularroya y enterrados en una fosa común (en su acta de defunción figura como fallecido el 30 de octubre a la 6 h. por las circunstancias producidas por el Movimiento Nacional). Los restos de estos doce serían exhumados y trasladados al Valle de los Caídos en 1959.
La Comisión Provincial de Incautaciones le abrió expediente de responsabilidades civiles según al artículo 6º del Decreto-Ley de enero de 1937, siendo sancionado con 1.500 pesetas.
En febrero de 1938 el Juez de Instrucción, Sr. Cusculluela, hizo público un escrito para que compareciera ante el juzgado para pagar la sanción impuesta y costas tasadas o, de lo contrario, se procedería a la subasta de sus bienes incautados. (Como quiera que ya había sido fusilado, sólo se entiende esta diligencia por no constar fehacientemente su defunción). En abril del mismo año, el Juez de Instrucción y especial de incautaciones de Ateca y su Partido, Joaquín García-Monge y Martín, hacía saber que por no haber hecho efectivas las 1.500 pesetas que se le habían puesto de sanción, se iba a proceder a subastar sus bienes.
Expedientes:
Tribunal Regional de Responsabilidades Políticas de Zaragoza
Fuente: Archivo Histórico Provincial de Zaragoza, Testimonio familiar
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